Se había visto en Holanda y Noruega. Incluso en Francia. Ahora también en Grecia. Y Alemania ya esta tomando medidas. Las gentes de bien no podemos cerrar los ojos ante este resurgir catastrófico: el nazismo.
Neonazismo lo nombran, en un intento de evitar la palabra sin el prefijo, pues produce escalofríos en las conciencias sanas, pero mas nos valdría llamarlo por su nombre y prepararnos… para la lucha.
Discurso fácil, directo a las entrañas, dejando a un lado la razón, la educación, la Historia,… la verdad. Y este discurso cala profundo en las personas ignorantes. Y se extiende.
Ya de Hitler decían que era un orador extraordinario, sin importar que él que pronunciaba el halago no tuviera ni idea de alemán. Y Queipo de Llano era capaz de tener en vilo noches enteras a media España y aún a la otra media. Pero el “saber decir” no implica el que “sepas lo que digas”, o de otra forma, la arenga razonada no implica la razón en la arenga. Y encima es mucho mas difícil el discurso social, desde el ideario de la izquierda, pues está orientado al cerebro y no al estomago, esta orientado a la razón y no a las visceras. Y eso es mas complicado de conseguir, pues implica que la persona que lo recibe se preste al análisis, el autoanálisis en algunos casos, y a eso no siempre estamos dispuestos.
Hoy, frente a una izquierda que no sabe llegar a los ciudadanos, el nazismo avanza. Frente a unos gobiernos esclavos de los Mercados, el nazismo avanza. Frente a unos ciudadanos que ven al 15M como un grupo de “perroflautas”, el nazismo avanza. Y mientras, panfletos de publicación diaria de la extremaderecha española, albergada en el seno del PP, publican en sus portadas los curriculum de los dirigentes de sindicatos estudiantiles, apoyados por la suerte de Brigada Político Social en la que se ha convertido el Ministerio del Interior.
El nazismo avanza.
Desempolva tus armas Europa, quizás las necesitemos.
Ya de Hitler decían que era un orador extraordinario, sin importar que él que pronunciaba el halago no tuviera ni idea de alemán. Y Queipo de Llano era capaz de tener en vilo noches enteras a media España y aún a la otra media. Pero el “saber decir” no implica el que “sepas lo que digas”, o de otra forma, la arenga razonada no implica la razón en la arenga. Y encima es mucho mas difícil el discurso social, desde el ideario de la izquierda, pues está orientado al cerebro y no al estomago, esta orientado a la razón y no a las visceras. Y eso es mas complicado de conseguir, pues implica que la persona que lo recibe se preste al análisis, el autoanálisis en algunos casos, y a eso no siempre estamos dispuestos.
Hoy, frente a una izquierda que no sabe llegar a los ciudadanos, el nazismo avanza. Frente a unos gobiernos esclavos de los Mercados, el nazismo avanza. Frente a unos ciudadanos que ven al 15M como un grupo de “perroflautas”, el nazismo avanza. Y mientras, panfletos de publicación diaria de la extremaderecha española, albergada en el seno del PP, publican en sus portadas los curriculum de los dirigentes de sindicatos estudiantiles, apoyados por la suerte de Brigada Político Social en la que se ha convertido el Ministerio del Interior.
El nazismo avanza.
Desempolva tus armas Europa, quizás las necesitemos.